miércoles, 3 de junio de 2015

Al diputado mal hablado

Tanto post pendiente.
El tiempo nos come. A veces me pregunto si esto es vida. Pero en fin, es la que tengo.

Voy a dedicar estas líneas a mi queja/reflexión sobre el lenguaje altisonante de un diputado, recientemente famoso en redes sociales justo por eso, porque no ha hecho nada relevante, solo ser malhablado.

El distinguido señor se llama Bonner. Se me olvidó el apellido, va a disculpar.

Lo han hecho parche porque dicen que su nombre en inglés significa algo para mayores de edad. Tampoco me he tomado ni me voy a tomar la tarea de buscar la traducción de su nombre, porque no es lo importante.

El punto es que este señor, en un arranque de cólera porque dice fue víctima de la violencia que aqueja al país, olvidó el tip imprescindible de conectar cerebro-teclado antes de dar “tweet”.

Escribió una babosada, en lenguaje soez, refiriéndose al discurso de primer año de gobierno de Sánchez Cerén (lo cual de paso si la vida me da agua será motivo de otro post).

Yo, como ciudadana que no usa ese tipo de lenguaje, me siento con toda la solvencia moral para manifestarme como ofendida ante ese tuit. Sí, puedo tirar la primera piedra.

Mis observaciones puntuales son:

1. Que el diputado justificó su lenguaje aduciendo “el calor del momento” porque había sido víctima de la delincuencia. Traduciendo: estaba ofuscado.

2. Que mucha gente justificó su lenguaje y dijo que estaba bien porque se estaba quejando y había libertad de expresión.

3. Que algunos lo justificaron porque dicen que fue sincero.

Ante esto yo digo:

1. El que yo esté enojado no implica que tengo que usar lenguaje soez. Eso solo demuestra que no soy capaz de expresar mi enojo de otra manera y que me falta vocabulario.

2. Perfectamente puede uno quejarse y expresar su descontento de manera educada, usando palabras que no ofenden a nadie.

3. Para ser sincero no se necesita ser vulgar ni grosero.

¿Por qué es importante reflexionar sobre este hecho?
Para mí, es tan simple como que nos estamos acostumbrando a que cualquier cosa es normal, todo está bien, hagan el degenere que quieran porque hay libertad, vale queso la educación porque es chivo expresarse de manera vulgar y así.

Se supone que este diputado se reúne con grupos de jóvenes y es su líder, según él mismo lo indica en su cuenta de tuitter. En esa visión ¿es lo que queremos de un líder juvenil? ¿mostrar que si me enojo está bien insultar y se justifica porque soy libre? ¿queremos dar el mensaje de que el respeto por las autoridades es algo malo y pasado de moda? ¿De verdad queremos jóvenes menos educados de lo que están actualmente?

Solo piense un momento en lo que ve escrito en redes: intolerancia, mala ortografía, falta de coherencia entre lo que se dice y lo que se está criticando...y todo eso está contenido en el tuit del diputado y sus reiteradas justificaciones.

Sí, se disculpó, pero no fue una disculpa sino una justificación, algo así como “estuvo mal, pero bien” según él.

Lo más triste es la cantidad de gente, igual mal hablada y sin poder escribir bien, que respalda su actitud.

Dan pena, pero sobre todo, dan miedo. Miedo de que sean el futuro de este país.


Por cierto, diputado, agarre un diccionario, tiene muy mala ortografía y que sea de un pueblo no lo justifica. Y todo lo que le he dicho no tiene nada, pero nada que ver con su afiliación partidaria.

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