martes, 9 de octubre de 2012

Tres imágenes para un montón de palabras

 Así quedó mi ya maltratado medio de transporte, la mañana del jueves 4 de octubre. No sé qué pasó ni quién pasó haciéndole semejante hueco...la cosa es que a la noche no estaba así y a la mañana zaz!. Necesito urgentemente separarme de este carro, siento que es como un imán que atrae golpes, no vaya a ser que quiera atraer uno más grande, mejor aquí corrió que aquí murió.
Ah sí, no recuerdo si conté que el jueves anterior a ese, el 29 de septiembre, un camión tuvo a bien incrustrarse en la puerta, lateral, bomper izquierdo...y claro, "se dió" a la señorita tan abusada esa denominada "fuga". Menos mal que anoté la placa y que el seguro al parecer responderá...porque yo de dónde!

 Estos me esperan cada mañana para sustraer mi sangre como su desayuno. Algunos tienen éxito, éstos no lo tuvieron. Se cuentan 6. Yo pensé, cuando una colección similar desapareció, que la señora de la limpieza había sacudido el monitor, pero no, las hormigas se los habían llevado. Lo más preocupante es que varios de ellos son de la variedad que transmite el dengue, por las patitas rayadas con blanco. #Miedo.

Este es el almuerzo de un día de estos. Quisiera hacer un tipo álbum diario de lo que como, talvez así entiendo por qué la báscula no retrocede...pero solo tomé ésta y de ahí se me olvidó ja ja ja ja. Bien chistoso y sospechoso se ha de ver uno con el teléfono tomándole foto a la comida #DigoYo

Y ya, se me acabaron las fotos bayuncas.

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