Conversatorios poéticos, background, contexto y comentarios intrascendentes de la vida adolescente

El por qué...el ser humano se vive preguntando el por qué de las cosas, así que para que usted no ande elocubrando, mejor le cuento el por qué publiqué los 6 poemas anteriores =)

Si leyó el anterior, se habrá dado cuenta que, al inicio de la U, fue corte total. Cada quien por su lado y , como diría la canción de Fito Páez, no sé por qué, pero jamás lo volví a ver...hasta un día, cuando teníamos 21 años, llamó a mi casa – siempre desde público ja ja – y me preguntó si nos podíamos ver. Así en buena onda y como amigos – ya ve, no soy rencorosa =) - vinimos a metrocentro en San Salvador, porque como la carrera de medicina no estaba completa en Santa Ana, eventualmente tuvo que emigrar a San Salvador también (concluya usted, que me cortó por gusto pues).

Resulta que en ese entonces quiso que empezáramos de nuevo, pero como dicen, lo que no es para uno...aunque no andaba con nadie, mi corazón tenía otra ilusión, y como no sé mentir, le dije la verdad. Ahora que lo veo en retrospectiva me siento como la mala del cuento, haberle dicho que no dos veces...así es el futbol. Ahí si de verdad ya jamás supe que había sido de su vida.

Ya había empezado yo mi vida de casada cuando un buen día casualmente coincidimos en la misma 202 para Santa Ana. Como dice la gente, “ya convenía” ese encuentro, porque las posibilidades de encontrarse de esa manera son muy remotas, tomando en cuenta que era una hora aleatoria y que hay al menos 6 rutas de buses diferentes para llegar de San Salvador a Sta Ana...y que justo el asiento al lado suyo viniera vacío...y que no haya yo pasado de largo y lo haya visto...en fin.

Como buen gato curioso, quise saber si le había ido bien en la vida. En lo intelectual, tal como me lo esperaba, era un éxito. Creo que estaba ya en el año social o algo así. Físicamente no se veía mal, como que había madurado un su poquito y había hecho ejercicio (qué quiere que le diga, no iba yo con los ojos cerrados). Pero en el lado que mi remordimiento quería saber, la historia estaba igual...seguía tan solo como lo había dejado...ni una novia en todo ese tiempo, ni siquiera un desliz con alguna enfermera...y me dio cosa. Me preguntó cuántos hijos tenía – quizá esperaba que le dijera sufridamente que media docena y fuera yo con un delantal o algo así – y le ví como decepción cuando le respondí que ninguno todavía. El bus llegó y la conversación terminó...y el tiempo pasó.

Por ahí me enteré, ya ni me acuerdo cómo, que su estilo triste y melancólico lo llevó por una especialidad algo contradictoria: ahora se dedica a dormir gente (anestesista). Y quien sabe si estará sacando otra especialidad, los médicos son únicos para eso de estudiar para siempre y sub sub sub especializarse.

Y qué removió todo esto? (espero no esté usted comiéndose las uñas). Si mi mamá Naya estuviera viva, diría que “lo llamé con el pensamiento”, porque de la operación de la mano lo que más ñáñaras me daba era la anestesia...y como él es anestesista...pues que me hubiera gustado que fuera alguien conocido y en quien yo confiara que no se iba a equivocar. Justo la noche anterior a la operación, estaba yo inocentemente esperando mesa en un restaurante, cuando...sí, concluyó bien usted, ahí estaba sentado...con una chica!!!!!

Como yo, soy rebelde porque el mundo me ha hecho así (inserte nota musical, ni idea del carácter asci), concluí que no era la esposa, porque estaban sentados del mismo lado de la mesa ja ja ja ja. Cabe aclarar que yo, independientemente del parentesco con la gente que esté comiendo, si sólo somos dos, prefiero estar de frente y no al lado, porque me gusta conversar y ver a los ojos a la gente (ya le di el tip por si un día me invita a tomar algo usted)

Los muy aburridos tenían cada uno un postre idéntico – en lugar de estar comiendo del mismo, digo yo, por la crisis - , lo cual además me dio risa porque era un sundae de vainilla, cosa que yo no como ni de broma. (No, no me le quedé viendo tanto como para saber qué era, es que soy tan cliente de la franquicia que le podría recitar el menú del lugar con los ingredientes y los precios).

Ya cuando se iban, ella pagó la cuenta – no, no estaba pendiente de ellos, pero el niño estaba en esa misma dirección y lo estaba cuidando – así que no me pareció que fueran sólo amigos.

Puedo concluir dos cosas agradables de lo que ví: por un lado, él andaba algo como que era computadora, lo cual sería bueno porque le huía a la tecnología y un médico aislado del mundo pues lleva las de perder; y por otro, que me alegra que al fin haya encontrado compañía...eso de andar solo por el mundo no estaba bien para alguien tan melancólico.

Si esta historia tuviera un sound track, indiscutiblemente sería éste:



Fin de la historia

...espere, a caso usted quería saber si nos saludamos o algo?...ja ja ja ja, la respuesta es no. Únicamente nos miramos, él con cara de “ha de ser tu hijo” y yo con cara de “al fin andas con alguien”. Qué le voy a hacer, soy tímida y él cobarde.

Creo yo que quizás esa cosquillita de no haber ido a darle la mano y que me dijera “te presento a mi novia-esposa-amiga, lo que fuera” y mi curiosidad felina innata fue lo que me hizo acordarme de los poemas y venir a publicarlos.

La verdad tengo un cuaderno manuscrito lleno de poemas y canciones que escribí en la niñez y adolescencia, de los cuales existen hasta donde me acuerdo 4 ejemplares impresos: uno se fue a México y de ahí a recorrer el mundo, otro partió a Nueva Zelanda, otro debe estar en algún lugar de la mancha y el último que imprimí fue como regalo de cumpleaños a mi madrina Ivonne. Después de esa última impresión – aunque cada vez los formateaba diferente, personalizando para quién iban- el disco duro de la máquina tronó, se recuperaron todos los archivos menos...cabal, el de los poemas. Así que sólo los tengo a mano, como al principio.

Ahi me dice usted, que leyó los anteriores, si alguna vez merece la pena que publique otros.

PD: si vos alguna ves lees esto y querés reclamar los derechos de autor por los que vos escribiste, con gusto te los paso...por eso les puse la licencia.