La comida de fuera y las impresiones desde adentro, parte I

Inevitablemente, cuando a uno le toca por a o b razón comer fuera con bastante frecuencia y no puede salirse de un radio de acción determinado, acaba siendo cliente frecuente de ciertos lugares.

Así que les comparto mi opinión sobre cambios, sugerencias, quejas y demás en algunos de los sitios que he visitado al menos alguna vez. Fuera interesante que los encargados de las franquicias o propietarios los vieran, seguro que más de un usuario los comparte.

A medida avanzaba en la redacción me di cuenta que este post iba a ser kilométrico, así que decidí dividirlo en partes, digamos uno o dos sitios a la vez.

Pizza Hut

Querido Señor Pizza Puch:
Me gusta mucho visitar su restaurante, pero me incomoda su decisión de ya no poner servilletas ni platos en las mesas, de hecho, no la entiendo. Los niños que atienden me dicen que es para ahorrar tiempo en la limpieza de las mesas, cosa que me parece risible porque hay momentos en que tienen hasta 5 mesas sucias y nadie aparece en escena, es decir, poner un par de servilletas no hará una sustancial diferencia en el tiempo de espera. Si es por eso, mejor tengan Gerentes y encargados más “buzos” que estén pendientes de que esos hechos de desatención no ocurran. Es molesto para el cliente querer usar una servilleta y tener que pedirla, especialmente cuando no hay nadie ni por asomo cerca.

Tampoco estoy de acuerdo conque hayan eliminado el podio (si es que así se llama) de la entrada. Al llegar a él uno sentía como el punto hacia donde dirigirse a que le tomaran los datos, incluso si no había alguien en ese momento. Ahora, uno entra como perdido (yo no pues, pero en general los clientes) y no encuentran hacia dónde o quién dirigirse. Aparte que inventaron tapar las áreas de cocina, quitando espacio al lobby, tanto físico como visual. Sinceramente me gusta ver qué ondas en la cocina y además, el estar a la vista los incentiva a ser ordenados.

Con relación a la comida, dígame Señor Puch, ¿a quién se le ocurrió la desafortunada idea de embadurnar la ensalada césar con el aderezo de una vez? Le contaré, que el público consumidor de ensaladas generalmente busca comida saludable y/o reducir calorías, ya sea por salud o por “pila” propia. ¿Sabía usted que, aunque la lechuga tenga pocas calorías y el pollo sea asado, el tal aderezo tiene como 250 calorías él solito? Antes, felizmente el aderezo venía en un tarrito aparte y la ensalada sin nada, con lo que uno tenía la opción de decidir si le quería echar o no y cuánto. Ahora, cosa risible también, le ponen el tarrito de aderezo, pero le dan la lechuga ya toda embadurnada, obligándo al cliente a consumir las 250 calorías extra quiera o no. Háganle un favor a la salud del pueblo y a la paz mundial y reviertan esa nefasta medida.

El menú y las opciones. ¿Ya se dieron cuenta que, en vista de sus no tan cómodos precios, sus clientes no son tan comunes y corrientes? Buena parte de la gente que los visita, va porque le gusta experimentar cosas diferentes, y la restricción de no poder variar el menú es como mínimo desilusionante. Veamos la ensalada trío, que lleva un copo de ensalada de atún, otro de pollo y otro de cangrejo (artificial por supuesto). Resulta que a mí me hizo daño por mi colitis la de pollo, porque tenía ingredientes no compatibles con mi padecimiento, pero no así las otras dos. Entonces pregunté si podían ponerme 2 bolitas de alguna de las otras para eliminar la de pollo y me dijeron que no, porque contablemente no lo podían registrar. Ashh. ¿Tan difícil es llevar la contabilidad de eso? ¿Y cómo hacen las ventas de hamburguesas que le ofrecen extra queso o agrandado? Misterios de la ciencia alimenticia que me gustaría conocer para darles algún par de ideas desde el punto de vista del consumidor. Otro ejemplo es la mezcla de atún para los toaster. Un dia no hallábamos qué podía comer el peque por su reflujo y yo sabía que la mezcla de atún lleva cebolla, así que les pregunté si lo podían preparar sin cebolla y me dijeron que no, porque era una pasta que ya tenían preparada. Perdón, ¿desde cuando?, ¿de dónde se las mandan preparada? Yo pensaba que sus productos eran preparados al momento. ¿Y si en muchos días nadie quiere nada de atún? Es, como solíamos decir, un problema de diseño.

Mire,¿ y qué le cuesta que hayan licuados de papaya en todas las sucursales? ¿Es que la gente de metrópolis y cascadas es menos que la de San Benito o autopista sur? Hay enfermedades para las que todas sus bebidas son dañinas y el agua es más cara que las bebidas!. Hágale un favor a la humanidad e incorpore más bebidas saludables y naturales en su menú.

Ah, sí, y no me rote tanto al personal! Imagino que requieren un su buen entrenamiento para tener “el espíritu Pizza Hut”, el cual en su máxima expresión es una gran cosa, pero que los niños nuevos a veces dan una mezcla entre lástima, cólera y decepción. Lo siento por ellos, porque no todos los clientes tienen paciencia de santo aunque anden con toda la prisa del mundo.

Finalmente, incluyan más opciones para niños. Si venden su imagen como restaurante familiar, piensen que en la actualidad hay infinidad de niños con problemas gástricos y la pizza no es la mejor opción, aunque el ambiente sea chivo. Si a los adultos nos dan tantas opciones de ensaladas y cosas con pollo asado, ¿por qué no hay pizzas light para niños? Delgadas, sin tanta salsa, sin sobrecargar de queso. Se puede, sino, échenle un ojo a la competencia. U otras opciones, viera que entre pizza y quesadillas no hay sustancial diferencia.

Gracias por su atención y espero mi tarjeta de cliente frecuente actualizada, porque como tiene fecha de vencimiento, hace un mes que ya no me hacen descuento y por eso me han visto menos por esos lados últimamente.